El pueblo banilejo celebra en el mes de noviembre sus fiestas patronales es un tiempo de muchas actividades, de encuentros y reencuentros, y la inmensa satisfacción de actuar como dijo de Hostos “..en el concepto de familia”.
Nada había afectado tanto a la población como el trágico accidente de aviación del que hoy doce de noviembre se cumplen quince años, la caída de la aeronave que hacía el vuelo 587 de Nueva York a República Dominicana.
Todos los pasajeros y el personal de vuelo fallecieron, doscientos sesenta, y cinco personas en tierra impactadas por el avión, la mayoría de los occisos eran dominicanos y de estos una buena parte banilejos que querían estar en su pueblo para participar de las fiestas que por tan fatal razón fueron suspendidas por primera vez en muchos años.
Desde ese entonces, cuando llega el mes de noviembre, Baní se prepara para honrar a su patrona la Virgen de Regla y recordar a quienes partieron de este mundo a causa del accidente, por tanto estas ahora son fiestas en las que Baní ¡Ríe y llora!
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