¡Fechas patrias y política!

En nuestro país las dos fechas más importantes de la historia 27 de febrero, Independencia Nacional y 16 de agosto, Restauración de la República, se ven opacadas en su celebración por los actos que de la política gubernamental se esperan.

Para la generalidad de la población, que prácticamente desconoce esos hitos históricos y por tanto el motivo para conmemorarlos, lo que le llama la atención es la presentación de las memorias que hace el Presidente de turno sobre el ejercicio gubernamental del año transcurrido.

Pero mucho más que eso, el morbo público se solaza con la esperanza de que se produzcan cambios en los diferentes ministerios e instituciones centralizadas y descentralizadas, por aquello de esperar el nombramiento de algún familiar o conocido.

Este diez y seis de agosto, como cada año, celebramos la gesta patriótica y heroica de la Restauración, pero la gente en lugar de hablar sobre su significado y la valentía de los dominicanos por volver a ser un país independiente y soberano, de lo que habla es de posibles cambios en el Gobierno.

Es natural que cada país escoja sus fechas importantes para celebrar logros gubernamentales, pero esa dualidad tiene el inconveniente del olvido de lo histórico, aunque ya es una tradición la mezcla de las ¡fechas patrias y política!