El país no se ha asombrado, aunque los medios lo han destacado, por el comunicado dado a conocer por tres de los hijos de Freddy Beras Goico, en el que anuncian que recurrirán a la Justicia para reclamar sus derechos legítimos como herederos en la partición de la herencia.
No ha habido asombro porque este es el pan nuestro de cada día cuando desaparece uno de los procreadores y que tenga algo sustancioso que legar, no tan sólo entre hijos de matrimonios anteriores o de los que antes se llamaban “hijos de la calle” sino entre hermanos de padre y madre.
La muerte es el destino final e inevitable de todo ser viviente pero es difícil de pensar en ella, sobre todo cuando se está saludable a pesar de que se tenga una edad avanzada y por esa razón es casi nulo el por ciento de personas que hacen un testamento, porque creen están llamándola.
En el ambiente artístico se nota que se le da una gran difusión cuando suceden estos casos, porque al haber sido el fallecido una persona conocida y aceptada por el gran público como si fuera un familiar o un amigo cercano, todos quieren estar enterados de lo que sucede y así opinar.
Se lamenta que haya que ir a los tribunales a dirimir situaciones, pero para eso han sido creados y la Ley es dura pero es la Ley, y ella será la que determinará lo que procede, lo lamentable es el alejamiento que se produce entre las partes envueltas.
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