Es una popular salsa que interpreta Tito Nieves en la que un presidiario se queja por el encarcelamiento que sufre y de que en la forma que lo trata no se quiere a nadie y le pregunta por qué lo castiga si él no ha hecho nada.
En las prisiones cada vez que llega un nuevo recluso los que ya están ahí le preguntan por qué le han llevado y al conocer la respuesta que siempre va acompañada por el “pero yo soy inocente” los demás se burlan y le responden “sí aquí todos somos inocentes”.
Las navidades que celebraremos este año están precedidas de un tema que ha dividido a la población en dos grandes mitades: los que están en contra y los que están a favor del aborto, a propósito de la observación hecha al Código Penal por el Presidente Medina.
Este martes el Congreso se apresta a conocerla y cualquiera que sea su decisión la situación seguirá igual con el pueblo dividido en dos grandes mitades: los que salieron ganadores en su posición y los que perdieron.
La palabra que más se ha escuchado es: muerte ya que de lo que se trata precisamente es de eso por la interrupción del embarazo por alguna causa y la situación de la embarazada en ese mismo orden.
Los abortos en nuestro país, aun estando prohibidos son algo normal, tanto así que existen clínicas que se dedican a eso y la gente lo sabe y las autoridades también, hay médicos reconocidos por esa labor y han ganado mucho dinero.
¿Qué saldrá de la sesión del martes en la Cámara de Diputados? No se sabe porque allá también las opiniones están divididas, pero lo que sí estamos seguros es que lo que venga estará consignado en la ♪Señora Ley♪